Francisco Padilla Beltrán, Cronista oficial de Culiacán
El 12 de febrero de 1920 el Rector de la Universidad de Occidente (hoy UAS) Bernardo J. Gastélum solicita con todas las formalidades de ley ante el Ayuntamiento de Culiacán, “que en un acto de generosa liberalidad, ceda en propiedad a la Universidad de Occidente los parques que actualmente le pertenecen y que están situados al norte de la plaza Rosales y de los de la señora Francisca Bátiz de Cañedo para construir en ellos las dependencias de la universidad y arreglar de una manera perfecta el sitio para el sports, (sic) petición que fue muy bien recibida en el cabildo”.
Estos terrenos habían pertenecido al gobernador Francisco Cañedo y los heredó a su esposa doña Francisca Bátiz, su hermano, el ingeniero Juan de Dios Batís, en ese tiempo regidor y maestro universitario gestionó el traspaso. El gobernador Ángel Flores y el presidente municipal Francisco Orrantia otorgaron el presupuesto a la universidad para que en ese lugar se construyera el Estadio Universitario y para tal propósito se comisionó al ingeniero Eliseo Leyzaola, también maestro y tesorero de la universidad.
En noviembre de 1921 el estadio fue inaugurado por las autoridades y comenzó a funcionar como un espacio para el deporte universitario. Un año después en una visita que hizo a Culiacán el secretario de Educación Pública José Vasconcelos aseveró que teníamos el privilegio de contar con el primer estadio en el país. Pero el proyecto original quedó inconcluso, al parecer no le alcanzó el presupuesto a la universidad. Durante la rectoría de Amado Blancarte (1945 – 1947) le encargó al ingeniero Andrés Ochoa le agregara otras gradas pues tenían el propósito de que el estadio fuera el escenario para la inauguración de la liga de béisbol de La Costa del Pacífico. En esa ocasión la población de Culiacán disfrutó de un juego en el cual se enfrentaron los Tacuarineros de Culiacán y Los Ostioneros de Guaymas.
Este año, en noviembre de 2022, el Estadio Universitario cumplirá cien años, sigue siendo un espacio emblemático del centro histórico de la ciudad y es orgullo de los universitarios, cuenta con instalaciones funcionales y sigue prestando valiosos servicios deportivos y culturales.
Felicidades y enhorabuena.